lunes, 17 de febrero de 2014

JAVIER


Muchas veces me preguntan, muchas me lo pregunto yo, para qué escribo. Hace muchos años, siendo yo una adolescente, en un curso impartido por José Saramago, alguien me quitó las palabras de la boca y le preguntó si escribir poesía servía para algo. Él respondió "todo sirve, todo sirve". Y así es...todo vale. Yo escribo básicamente porque no sé no hacerlo, que viene a ser como decir que escribo para mí. Tengo más de treinta diarios empezados a redactar desde que comenzó mi memoria, desde que existe el blog los he ido sustituyendo; y desde que comparto los artículos escribo también por si algo de lo que plasmo en este papel "virtual" puede llegarle a alguien. Sin pretensión de nada. Pero desde que nacieron mis hijos también, y sobre todo, escribo para ellos. A mí me ha gustado mucho leer cosas escritas por padres o abuelos y pienso que algún día puede, o no, gustarle a mis hijos hacerlo, quizá más cuando se marchen lejos o me marche lejos yo, o cuando necesiten conocerme o reconocerse.

Por todo eso este post es sobre todo para él. Y para mí. Para recordar siempre a través de versos y fotos, lo que yo viví, lo que vivimos, lo que sentí cuando él nació, los regalos que nos hicieron, las felicitaciones, las palabras que me llegaron. Hay pocos momentos como este en la vida y hacerse partícipe de las alegrías ajenas me ha parecido la mejor manera de "contagiarse". Después de muchos días sin tiempo para retomar el blog lo hago con lo mejor que tengo dentro para dar. Para los que se quieran contagiar y  para ti, supongo que para el futuro.

Volvería a nacer
como una aventura
y empezaría de nuevo otra vez,
aunque sólo fuera
por tener la certeza
del préstamo de tu vida
con la mía,
porque eres un regalo
sobrevenido
y me has ganado
por la mano
mi destino.
No sé si me elegiste tú a mí
o yo a ti
para descubrir
la vida
que estaba al otro lado.
¿Cómo se puede tener
nostalgia del presente
porque sé
que ya no volveremos a encontrarnos
dónde ahora estamos?
Volvería a haber flores
por todas partes,

y una mesa preparada
para tu llegada,
y un hermano que te espera,
y ropa nueva,
ropa heredada,
ropa para estrenarla,
para aprovecharla
porque...



porque sólo vas a vivir una vez,
porque yo sólo voy a ver crecer
tus pies y tus manos
una vez mientras caminamos
tú por tu vía
y yo por la de mis zapatos,
que va a coincidir, mientras yo siga,
con la tuya un rato;

y porque yo
sólo voy a tener
tan fuerte el corazón
esta vez,
sólo esta vez
voy a ser tan fuerte
como para querer
vivir para siempre.
CruzadoC

1 comentario:

Mery dijo...

Cuando lo pueda leer va a alucinar de lo que se quiere a personitas con la apenas has convivido dias. Le va a encantar!