viernes, 23 de diciembre de 2016

AHORA


Cuantas navidades celebraremos
antes de comprender "La Navidad";
cuantos tiempos tendremos sin calidad
antes de vivir presentes supremos.


Cuantas guerras, de balas y extremos,
de pasados, futuros y ansiedad,
antes de descubrir que no hay "Verdad";
cuanta agua pueden batir nuestros remos.


Cuantos diciembres más podremos hacer
como que sólo estamos viendo luces;
y cuanta nieve aguantaremos caer.


Con la respuesta nos damos de bruces:
el Ahora es todo lo que puede ser,
aquí donde se hayan todos los cruces.
CruzadoC
FELIZ NAVIDAD


jueves, 15 de diciembre de 2016

BERLIN




 El día de nochevieja siempre hago una lista de propósitos que trato de cumplir a lo largo del año, a finales del 2015 me propuse que este sería un año de viajes, pero Berlín no estaba en mi lista. Como siempre, los mejores planes surgen sobre la marcha. Este lo he hecho acompañada de mi compañero de vida que ha resultado ser también un gran compañero de viaje y desde aquí le doy las gracias.

MI primera sensación de Berlín fue frío, no sólo frío meteorológico( que quizá en octubre no era intenso), sino que sentí un aire bélico cortándome el aliento. Lo primero que hicimos-por recomendación mayoritaria- fue una visita guiada por la parte histórica en la que nada más comenzar la guía nos advirtió que esta ciudad era como un cuadro abstracto, que al principio te resulta inexplicable y hasta feo, pero que, una vez comprendes por qué está allí esa raya o ese punto,  puedes llegar a amar. Lo mismo le pasa a Berlín con la historia, te exige conocer su historia para poder disfrutarlo. Y eso fue lo que hicimos el PRIMER DÍA.

Hay muchos Berlines. Empezamos por el Berlín prusiano  recorriendo la universidad Humboldt o la maravillosa plaza de los Gendarmes con sus dos iglesias gemelas ( la luterana y la cristina) ; para seguir con el Berlín del tercer Reich( apasionante) y acabar con el Berlín de la Guerra Fría 

 Esta es la piedad de  Khate Kollwitz, una artista alemana pacifista exiliada al inicio del nazismo que perdió a su hijo en la primera Guerra mundial y a su nieto en la segunda.
 Aquí está la plaza Bebel, en la que figura una inscripción de Heine grabada mucho antes de la llegada de los nazis y en referencia  a la Inquisición Española que se erigió , por desgracia, como un augurio de lo que habría de venir " Es sólo un preludio, allí donde se empiezan quemando libros, se acaban también quemando personas."Y así sucedió. En el 33 Hitler ordenó quemar todos los libros opuestos al nazismo de la Biblioteca de la Universidad ubicada en esta plaza ( las fotos en blanco y negro las tomé en el Museo de la topografía del terror). Lo que vino después todos lo conocemos
.
Este mural representa la división que marcó Berlín entre el año 61 y el 89 a través de este muro de la vergüenza por cuya culpa se calcula que murieron unas 200 personas tratando de cruzarlo durante los años de la Guerra Fría. A mi marido y a mí nos encogió el alma esta toma.
Tras tomar un tentempié en el Café Einstein frente al Check Point Charlie( el nombre le viene del alfabeto militar) y escuchar la historia de como este punto fue el lugar donde pudo haberse iniciado la tercera guerra mundial si los tanques , primero americanos y después soviéticos, no hubiera dado cinco pasos atrás, luego otros cinco, y muchos cincos más hasta perderse de vista fuimos al Memorial al pueblo judío, al famoso monumento en el que perderse era obligatorio, había  que sentirse perseguido, confundido, pequeño....como se sintieron los judíos. 
Por la tarde fuimos  por nuestra cuenta a visitar la East Galery y el famoso muro lleno de graffitis

Y  de noche nos marchamos a escuchar a la filarmónica de Berlín, un momento que guardaré para siempre en mi cajita de los recuerdos. De vuelta al hotel íbamos encontrando cosas curiosas como esta obra artística en plenas escaleras del metro.



 SEGUNDO DÍA: no podíamos marcharnos de Berlín sin ir al campo de concentración ( que no de exterminio ) más cercano: Sassen hausen De esta visita sólo conservo la foto en la estación porque el corazón me impidió fotografiar nada. Los horrores que vimos y hasta sentimos casi nos obligaron a continuar por la tarde con la historia del genocidio que no sólo fue judío, sino que abarcaba a homosexuales, comunistas, pacifistas, todo tipo de políticos opuestos al nazismo y a los que Hitler llamó " asociales". Asocial hubiera podido ser un autónomo que rechazaba dos veces un empleo, es decir, que si lo que uno piensa es que a él no le hubiera tocado...pues puede que si, todo el que no alzaba la mano acababa de la misma manera. Por este campo de concentración, que sólo en contadas ocasiones fue usado para exterminar , por ejemplo, soldados rusos, pasó Largo Caballero. Un dato que yo desconocía y que me sirvió muchísimo para encajar determinados huecos históricos que tenía en mi cabeza.
Berlín es una ciudad que ha pedido perdón al mundo y que ha sabido así cerrar la brecha que separaba a los alemanes, quizá podría ser una idea para otros países como el nuestro que continua dividido. Quizá salir a pedir perdón cambiara las cosas. Por cada rincón, especialmente en el barrio judío, hay homenajes a este pueblo perseguido: cementerios y placas en el suelo con el nombre y la fecha de asesinato ( porque sin más vueltas así lo llaman, lo que fue,  asesinato) pueblan este rincón cercano a la Sinagoga. Muchas ganas de llorar en este barrio.


EL TERCER DÍA  fue de mercadillos , Flohmark y toda su vanguardia mezclada con lo vintage nos condujo a un precioso parque lleno de bicicletas y de nuevo a la plaza de los Gendarmes-nuestra favorita, ya se ve- en metro para devorar un chocolate delicioso en una famosa pastelería conocida por sus réplicas en este dulce de monumentos históricos y así coger fuerzas para enfrentarnos otra vez al pasado: a la topografía del terror, donde se exponen ampliamente fotografías de los horrores nazis desde el 33 al 45 ubicada precisamente en lo que fueron los cuarteles de la Gestapo. Para mí fue estremecedor ver ilustrada la historia de este modo que no es sino el  modo alemán  de, otra vez,  pedir perdón. 

 EL CUARTO  DÍA completo lo dedicamos al arte callejero( esta imagen de Anna Frank junto al museo que lleva su nombre me inspiró tanta ternura que le dediqué un poema) y a los escaparates de diseño y decoración  del barrio judío. En una de las esquinas la tienda vintage( concepto que tanto me gusta) " Humana" te llamaba a entrar, un estilo diferente de shopping





 Tacheles , comida en el restaurante-totalmente recomendable- Republik Berlín junto al lago y noche en el Bundestag con visita guiada y  vistas a toda la ciudad. No pude evitar pensar que desde allí se toman las decisiones europeas que acatamos y marcan tan fuertemente  nuestro destino.
ÚLTIMO DÍA:  antes de coger el avión ya sólo quedaba tiempo de decir adiós a Marx y Engels , cerca de la avenida Under Der Linden( avenida bajo los tilos-tilos que Hitler mandó talar para que pudieran lucir mejor los desfiles nazis por las amplia calle- tilos que, como aquellos libros quemados, no volverán) 


AUF WIEDERSEHEN, BERLIN